miércoles, 10 de febrero de 2010

Vuelve















Vislumbre en el horizonte de mi confusión,

la silueta de una bella mujer bañada de mil recuerdos,
que estuvo ahí cuando estuve muerto,
inerte, aletargado, presa de deseos inciertos.

Y la indiscreta decepción se apodero de su rostro,
y comprendí con tristeza, lo que para ella ahora soy.
Incipientes emociones que en el fondo reconozco,
pues aunque me partan el alma, se que yo soy el creador.

Una loza de impotencia se ha incrustado aquí en mi mente,
pues por tonto fui a perderte ¡Oh, insoportable dolor ¡.
Ya mis labios se erosionan sin tus besos sabor miel,
y mis brazos no te sienten y se pudren en la hiel,
hiel de la amarga existencia, que el arrepentimiento engendra,
hiel que me indica tu ausencia y la falta de tu amor.

Mas mi espíritu es guerrero, es un osado ladrón,
que esperara con paciencia, que volverá a ser la flor.
La flor que juntos sembramos, la flor que es mi ilusión,
pues perderte fue la muerte de la apatía sin razón,
que dominaba mis actos y de mi vida era dueño,
que termino por ahogarme en tu indeseable desdeño.

Ojos de luna serena, vuelve a mis brazos amor,
o este vacío me hará polvo, me hará perder la razón.
Ojos de luna serena, vuelve a mis brazos amor
o este vacío me hará polvo, me hará perder la razón.

Seré el aura que proteja para siempre nuestras vidas,
y el amigo y el amante, y el bufón para que rías.
Y aunque muera nuevamente, volveré y seré tu esclavo,
pues sin ti seria una estrella grisácea y apagada
que, melancólica, vagaría e iría gritando al universo su dolor.
Ojos de luna serena, piel de canela que arde, vuelve, regresa,
vuelve y verás de que manera puedo y podré amarte.

martes, 9 de febrero de 2010

S-a-p-o













No había tiempo, no había espacio. Éramos sólo un cúmulo de energía mezclada que ardía en el fuego de la pasión desenfrenada e incorpórea, un espectro de luz que irradiaba amor y donde todo era felicidad y placer. Afortunadamente, soy groseramente feo según los estándares de la estética humana, y las de mi especie se conforman con la sola satisfacción de las necesidades fisiológicas propias de nuestra anfibia clasificación, por tanto, mi mente tiene el tiempo suficiente para disfrutar de estas fantasías inverosímiles, de mis relaciones espectrales y sobrenaturales. No saben los príncipes de lo que se pierden al no ser sapos, y desconocen por completo todas las responsabilidades y deberes de las cuales se librarían al ser de mi condición,fuera del círculo social y las relaciones interpersonales. Creo que soy un sapo un poco extraño, pero lo bueno de esto es que yo no tengo que rendirle cuentas a nadie, y "en la mente uno hace lo que se le paga la gana".